Desarrollo a escala humana - Una interpretación a los aportes de ManFred Max Neef, 1986

El autor advierte la carencia de políticas viables en el desarrollo económico, social, cultural y político, e inserta en el discernimiento una discusión de los principales modelos de desarrollo que en las últimas décadas ha contribuido a la polarización de clases sociales en América Latina, estos son: el desarrollismo y el neoliberalismo; criticando en ambas el modelo básico primario exportador del que se sosteniene su política económica, que a largo plazo beneficia el desarrollo industrial de unos cuantos paises a costa de la mano de obra barata que hacen los países latinoamericanos. Man Fred Max Neef sitúa este fenómeno dentro de un proceso pendular, en el que las políticas de Estado giran entre esos dos modelos. Reflexionando, que en la práctica los valores originales de estas corrientes, que yacen en un tipo de socialismo y liberalismo, nunca se aplicaron.

Sobre el desarrollismo
Enfoca el desarrollo local y otorga valor a la participación social, sin embargo tiene un nivel de participación limitado, y que a pesar de reconocer los límites que deben establecerse en una economía social de mercado (la apertura del mercado), ante el modelo económico industrial que privilegia el mercado externo con la exportación de materia prima sin valor agregado, y descuida el interno, poco puede hacer para controlar la desigualdad que ello genera. La preocupación de Neef por las políticas sociales es la misma que tuvo Adam Smith con la pobreza; si las políticas económicas no se aplican de la mano con las políticas sociales, la riqueza obtenida de un país se medirá solo en indicadores macroeconómicos que frecuentemente lo percibe una minoría, y no en términos de calidad de vida para toda la gente. En este punto también se critica al nacionalismo, por ser inviable al aplicar desarrollismo, y al devenir frecuentemente en un descontrol por el poder (autoritarismo). Las razones del fracaso del desarrollismo según Neef se ven en la “incapacidad para controlar los desequilibrios monetarios y financieros, y a que su enfoque de desarrollo, predominantemente económico y concentrador, descuido otros procesos sociales y políticos que comenzaban a emerger con fuerza.”

Sobre el neoliberalismo
En la actualidad aunque no sea posible detectar una filosofía propiamente liberal, lo que permite su acepción es analizar las prácticas que se han observado en los gobiernos liberales desde el famoso tratado del Consenso de Washington, y que a simple vista el patrón que prima y hace peligrar la democracia es su racionalidad económica, profundamente mecanicista, que esta se base solo en la concentración, y no en la distribución. De esa manera se justifica el término Neoliberal, y han permitido a muchos teóricos definirlo como la alienación de un modelo político, que es autoritario, exclusivo, y menos pensado para la mayoría, y por ende menos democrático “las democracias del Neoliberalismo excluyeron de la vida política a las masas populares, privándolas de canales de participación social o de presión política” señala Neef. Su inadaptabilidad a las condiciones de países con pobreza dificulta el desarrollo, entendido esta como la articulación de los diferentes actores sociales capaces de participar en las principales decisiones políticas que afecta a cada uno de sus sectores; en eso consiste la idea principal de Desarrollo a Escala Humana que Neef intenta desarrollar, advirtiendo que “la miseria no puede erradicarse como consecuencia de la liberalización de un mercado del que los pobres se encuentran de hecho marginados”.

Comparación
En ambas siempre ha existido un culto por la forma sin mirar el fondo, ellas transitan en un círculo vicioso, porqué confían en el mismo modelo primario exportador, como en el caso del Perú y otros países de América Latina como Uruguay, Bolivia y otros, los pobres de estos países ven afectado por este modelo su desarrollo al no insertarse en la actividad económica de una manera sostenible (no explotadora para ellos). Sumado a las políticas proteccionistas de las potencias del norte no dejan que los países pobres cobren lo justo por sus exportaciones. Un desarrollo apoyado en las contribuciones externas de capital, también queda descartado de plano por el gravísimo estado en que nos mantiene el endeudamiento, y la vulnerabilidad que nos generaría frente a una crisis internacional. Dependientes del capital extranjero, y privilegiando el mercado externo con las exoneraciones arancelarias de todo lo que nos llegue de afuera, nunca reforzaremos nuestro mercado interno, motor y fuerza impulsora principal de un desarrollo sostenible.

Como lograr el desarrollo a escala humana
Con la participación de la sociedad civil, articulada con los movimientos sociales, organizaciones de base, la universidad, los agricultores, la iglesia y la autoridades locales, sus representantes sentados juntos en una mesa dialogando, es importante para generar un desarrollo concertado, visto básicamente desde la necesidad de todos sus actores. Y que permitirá las articulaciones orgánicas, los niveles de auto dependencias, personas sujetos y el respeto por esa diversidad. “auto dependencia y articulaciones orgánicas, son los pilares fundamentales que sustentan el Desarrollo a Escala Humana”.

Luis Alberto Grimani Villasante
Periodista